El 4 de enero de 2010, el país entero se conmovió con la noticia del fallecimiento de Sandro, el ídolo que marcó una época en la música popular argentina y latinoamericana, había sucumbido a un shock séptico tras complicaciones derivadas de un doble trasplante de corazón y pulmón. Tenía 64 años y un legado que trascendía fronteras y generaciones.
Nacido el 19 de agosto de 1945 en Buenos Aires. Roberto Sánchez Ocampo, su nombre real, encontró su pasión por la música a temprana edad. Inspirado por Elvis Presley, comenzó a imitarlo a los 13 años, soñando con alcanzar los grandes escenarios. Su esfuerzo lo llevó a comprar su primera guitarra a crédito, con la que inició una carrera que pronto cambiaría su vida y la de sus seguidores.
Con el tiempo, adoptó el nombre artístico de Sandro, una elección que homenajeaba un deseo frustrado de sus padres de anotarlo así en el registro civil. Su transformación en “Sandro de América” reflejaba no solo su enorme talento, sino también su capacidad para conectar con un público que lo adoraba.

Su popularidad no se limitó a la música. Con 12 películas en su haber, Sandro hizo historia al convertirse, en 1970, en el primer artista latinoamericano en actuar en el Madison Square Garden de Nueva York. Durante las décadas de los 60 y 70, álbumes como “Sandro de América” y “Una muchacha y una guitarra” lo consagraron como el rey de la balada romántica.
A pesar de su imagen romántica, Sandro tuvo un papel crucial en los orígenes del rock argentino. Fue uno de los impulsores de “La Cueva”, un lugar clave para artistas como Javier Martínez, Billy Bond y Pappo. Décadas después, su influencia fue reconocida por artistas como Charly García y Pedro Aznar, y bandas como Divididos y Los Fabulosos Cadillacs le rindieron homenaje en discos tributo.
El misterio siempre rodeó su vida privada. Su casa en Banfield se convirtió en un lugar icónico, donde sus fanáticas, conocidas como “las nenas”, se reunían cada 19 de agosto para celebrar su cumpleaños. Su matrimonio con Olga Garaventa en 2007 fue uno de los pocos eventos que lo sacaron de su habitual reserva.

Banfield, además de ser el punto más importante de las celebraciones y homenajes a la memoria de Sandro, el Municipio de Lomas de Zamora, inauguro en 2023 el Hospital de Diagnóstico Inmediato Roberto Sánchez, ubicado en Cochabamba al 900, entre Campos y Capdevila.
En la inauguración de la institución, la propia Olga Garaventa, esposa de Sandro, señaló: “Va a servir para que las personas sean atendidas y salgan con mucha salud. Me parece un sueño hecho realidad”.
A quince años de su muerte, el legado de Sandro sigue vigente. Con más de 8 millones de discos vendidos, 52 álbumes originales y clásicos inolvidables como “Porque te amo” y “Quiero llenarme de ti”, su influencia en la música y la cultura popular argentina permanece intacta, consolidándolo como una figura irrepetible en la historia del arte latinoamericano.