En la previa del cierre de campaña presidencial en Moreno, Axel Kicillof lanzó una fuerte advertencia al señalar que el oficialismo podría intentar sacar rédito político de un eventual episodio de seguridad. El gobernador bonaerense cuestionó las falencias en la custodia de Javier Milei y responsabilizó a la Nación por la organización de los operativos.
En diálogo con El Destape, Kicillof sostuvo: “No vaya a ser cosa, porque ya van dos eventos que dijeron magnicidio, intento de magnicidio, que quieran utilizar esto electoralmente. También lo aviso”. Y agregó que “viene fallando mal la seguridad del presidente, fallando mal. No están cuidando al Presidente y a los hechos me remito”.
El mandatario provincial recordó que la Policía Bonaerense fue la que actuó para evacuar a Milei en Lomas de Zamora, y señaló que su ministro de Seguridad, Javier Alonso, envió un informe detallado a la Casa Rosada sobre las “vulnerabilidades” y los “graves riesgos” que representaba el lugar elegido para el acto en Moreno.
Con ironía, Kicillof apuntó contra el discurso libertario sobre supuestos intentos de magnicidio. “Un gobierno que reconoce que no puede impedir que entren infiltrados extranjeros a la Casa de Gobierno… y uno tiene una responsabilidad porque mañana llega a pasar algo con el Presidente y van a decir ‘fue en la provincia’”, lanzó.
Finalmente, cuestionó la estrategia de elegir lugares conflictivos para los actos de Milei, insinuando que “pareciera a propósito”. De esa manera, el gobernador dejó planteada la sospecha de que la inseguridad presidencial podría transformarse en un arma electoral en la recta final de la campaña.
