El informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) reveló que la actividad industrial en Argentina registró una nueva caída en noviembre de 2024. En comparación con el mismo mes del año anterior, la actividad retrocedió un 1,7%, marcando la decimoctava caída interanual consecutiva. A pesar de una leve mejora desestacionalizada del 0,4% respecto a octubre, la tendencia general refleja un estancamiento que pone en duda las expectativas de recuperación que había planteado el Gobierno nacional.
El acumulado de la actividad industrial en lo que va de 2024 muestra una caída del 10,7%, resultado de la recesión profunda que afectó al primer semestre del año. Si bien sectores como Alimentos y Bebidas, y Refinación del Petróleo continúan con algunas de las mejores cifras mensuales, el panorama global sigue siendo negativo. De las 16 divisiones que forman el índice de producción industrial, 12 registraron caídas interanuales, destacándose los retrocesos más pronunciados en Productos Minerales No Metálicos (-20%), Productos de Caucho y Plástico (-16,2%) y Productos Textiles (-17%).
En cuanto a los sectores que experimentaron incrementos interanuales, Alimentos y Bebidas lideró con un crecimiento del 8,4%, seguido por Maquinaria y Equipo (+7,2%) y Refinación del Petróleo (+1,5%). Sin embargo, estos sectores no logran contrarrestar las importantes caídas que afectan a otras áreas clave de la industria. El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja, hizo hincapié en la necesidad de una normativa que facilite la inversión, incluyendo medidas como la amortización acelerada y la devolución de IVA, con el fin de mejorar la competitividad y expandir las cadenas de valor en sectores estratégicos.
A la par de este informe, el INDEC también presentó datos sobre el sector de la construcción, que mostró un leve crecimiento mensual del 2,2% en noviembre, aunque en el acumulado anual de 2024 la caída interanual fue del 28,5%. Este retroceso en la actividad constructiva se refleja en la disminución de consumo de insumos clave, como cerámica, acero para construcción y ladrillos, lo que refuerza la percepción de un estancamiento en ambos sectores productivos esenciales para la economía del país.