El décimo mes del año llega con una batería de aumentos que impactarán de lleno en el gasto de las familias y volverán a presionar sobre la inflación. Alquileres, colegios privados, transporte público, prepagas, cable y telefonía se suman a la lista de rubros que tendrán ajustes desde el inicio del mes, mientras que también se esperan definiciones en combustibles y tarifas de servicios.
En materia habitacional, los contratos alcanzados por la derogada Ley de Alquileres registrarán un incremento del 46,1%. Si bien la suba se desacelera respecto de meses anteriores, continúa siendo un peso significativo para los inquilinos, ya que se calcula en base a la inflación y los salarios.
La educación privada también sentirá el impacto: en la Ciudad de Buenos Aires, las cuotas de los colegios con subvención estatal aumentarán 2,1%, con valores que oscilarán entre $37.649 y $259.072 según el nivel y la subvención recibida.
La salud no quedará al margen. Las cuotas de la medicina prepaga tendrán un ajuste de entre 1,9% y 2,4%, que se trasladará también a los copagos. Desde el Gobierno recordaron que los afiliados pueden consultar coberturas y opciones en la plataforma de la Superintendencia de Servicios de Salud.
El transporte público acompañará la tendencia alcista. En la provincia de Buenos Aires, el boleto mínimo de colectivo pasará a costar $550,09 y podrá llegar a $707,26 según el recorrido. En la Ciudad, el pasaje mínimo será de $546,66 y alcanzará los $702,86 en los tramos más largos. Además, el Subte subirá a $1112,76 y el Premetro a $389,46.
Los servicios de cable y telefonía anticiparon un ajuste de hasta 3% en sus tarifas a partir de los primeros días del mes. En tanto, se aguarda la aplicación parcial del impuesto a los combustibles líquidos, lo que podría generar nuevos aumentos en la nafta y el gasoil. A eso se suman posibles correcciones en las tarifas de electricidad y gas, estimadas en torno al 1,9% dentro del esquema de actualización mensual que rige desde junio.