En plena conmoción por las denuncias de corrupción en la ANDIS y con rebote judicial, la mesa libertaria apuró una jugada en la Tercera Sección electoral para mostrar músculo en territorio peronista. El operativo apunta a Lomas de Zamora, distrito clave del conurbano que concentra parte del 35,4% de los electores bonaerenses.
Hay que señalar que la caravana se da en un día clave para los lomenses: todos los miércoles cientos de jubilados se concentran en Plaza Grigera para reclamarle al gobierno nacional por el ajuste a las poblaciones más vulnerables. Recordemos: Milei redujo su poder adquisitivo y hasta les sacó los medicamentos del PAMI. También hay que señalar que el recorrido solo se concentra en las zonas céntricas, situación que denota que a los libertarios no les importan gobernar para todos los barrios.
Rumbo a las elecciones del 7 de septiembre, Javier Milei alista nuevas paradas en Junín, Moreno y, especialmente, Lomas. La campaña, que reunirá previsiblemente a Karina Milei, Santiago Caputo, Eduardo “Lule” Menem y Sebastián Pareja, trabaja para coordinar un acto con alto impacto simbólico mientras el Gobierno navegaba los allanamientos y detenciones que siguieron a los audios atribuidos al ex titular de la ANDIS, Diego Spagnuolo, donde también se mencionó a la propia secretaria General de la Presidencia y a Lule Menem.
El calendario de campaña preveía que el Presidente visitara Lomas el miércoles 27 de agosto, en lo que hubiera sido su segunda incursión fuerte en la Tercera Sección tras la foto de Villa Celina. La elección del distrito no fue casual: la estrategia buscó fortalecer a las boletas locales de La Libertad Avanza y disputar el corazón del sur del conurbano. El esquema contempla un formato similar al del Club Atenas de La Plata, con Milei rodeado de figuras nacionales como José Luis Espert, Karen Reichardt y Diego Santilli, para marcar presencia frente al peronismo.
En ese armado, el excomisario Maximiliano Bondarenko intenta emerger como cara libertaria en la Tercera Sección. Alineado con la agenda de “mano dura”, que apunta a la gestión Kicillof quien cuya gestión es la única que ayuda al Municipio para afrontar a dicha problemática en medio de la desidia del Estado nacional.