La inflación mayorista continúa su marcha ascendente, con el más alto en los últimos cuatro meses, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Es que el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) registró en enero de 2025 un aumento del 1,5%. Este incremento refleja la falta de controles efectivos sobre los precios de productos nacionales e importados, en un contexto económico en el que el gobierno de Javier Milei aún no ha logrado contener los costos de producción que siguen golpeando a la economía argentina.
Entre los principales factores que impulsaron esta suba se encuentran los aumentos en productos como el petróleo, los productos químicos y los alimentos, que siguen subiendo de manera constante. Mientras tanto, las promesas de Milei de reducir la inflación mediante ajustes y una política de shock parecen no tener el efecto esperado. De hecho, en vez de controlar la inflación, los sectores productivos continúan trasladando los aumentos al mercado mayorista, alimentando un círculo vicioso que afecta tanto a los productores como a los consumidores.
El presidente, que había asumido con el compromiso de un cambio radical en la economía, parece no tener respuestas concretas ante estos nuevos incrementos, que no solo afectan a la cadena productiva sino que también alimentan las expectativas inflacionarias. En este escenario, el impacto de sus políticas, que buscan reducir el gasto público a costa de medidas de ajuste, sigue sin generar una mejora palpable en el control de los precios. Mientras tanto, la inflación sigue creciendo y la clase media y baja continúa sintiendo los efectos más duros de esta crisis económica.