El presidente Javier Milei atraviesa su momento más delicado desde que asumió hace 21 meses. Su imagen positiva cayó al 39%, perforando por primera vez la barrera del 40, mientras que un 53,4% de los encuestados considera que su desempeño es “muy malo”.
El clima social, según una encuesta realizada por el Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP), se caracteriza por dos sentimientos principales: bronca e incertidumbre. El dato que más preocupa al Gobierno es el desplome de las expectativas: apenas el 27,5% de la población cree que la economía del país se recuperará en los próximos meses. Hace solo dos meses, ese número era casi del 50%.
La insatisfacción se refleja con fuerza en los bolsillos. Más de la mitad de los consultados asegura que los ingresos no alcanzan para llegar a fin de mes, un salto abrupto respecto del 29% que manifestaba lo mismo hace un año. Esta sensación se traduce en un creciente reclamo por un cambio en el rumbo económico, especialmente entre los sectores de menores recursos que fueron clave para la llegada de Milei al poder.
El impacto político también se hace visible. La adhesión al oficialismo se redujo notablemente: quienes se identificaban como votantes de Milei pasaron del 29% al 20%. Además, perdió apoyo entre los jóvenes y entre sectores populares, y su base de respaldo se concentra ahora en franjas de mayor poder adquisitivo.