El Senado de la Nación sancionó hoy el proyecto que suspende las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), con 43 votos a favor, 20 en contra y seis abstenciones. La medida, que se da en el marco de una de las semanas más turbulentas para el gobierno de Javier Milei debido al escándalo del Criptogate $LIBRA, encontró respaldo tanto en sectores del oficialismo como en algunos bloques de la oposición.
A pesar de la controversia que se generó alrededor de la modificación, que en principio había incluido la eliminación total de las PASO, la versión final logró el apoyo de un grupo amplio de legisladores. En el oficialismo, los senadores más cercanos a Cristina Kirchner, como José Mayans, Anabel F. Sagasti y Oscar Parrilli, se opusieron al proyecto, pero otros, como Guillermo Andrada y Sergio Leavy, respaldaron la iniciativa. Además, la ley fue apoyada por el bloque libertario, algunos radicales y sectores del PRO, lo que reflejó una dinámica compleja de negociaciones políticas.
Los argumentos a favor de la suspensión apuntaron al ahorro económico y a la necesidad de realizar ajustes en los procesos electorales. “Desde que existen las PASO, casi no hubo primarias. Las elecciones estuvieron llenas de primarias ficticias hechas para legitimar a los dueños de las lapiceras”, expresó Ezequiel Atauche, jefe de bloque oficialista. Sin embargo, los opositores denunciaron que la medida socavaría el sistema democrático. El radical Maximiliano Abad y Francisco Paoltroni, por ejemplo, cuestionaron duramente la modificación, defendiendo la validez de las PASO como un mecanismo que asegura la competencia abierta y ordenada.
Mientras se desarrollaba la sesión en el Senado, el tema del Criptogate $LIBRA dominó la agenda. A pesar de los intentos de la oposición por conformar una comisión investigadora y solicitar interpelaciones a funcionarios del Ejecutivo, como Karina Milei y Guillermo Francos, las iniciativas fueron rechazadas. La oposición, encabezada por figuras como Pablo Blanco y Guadalupe Tagliaferri, acusó al Gobierno de ocultar información sobre el uso de criptomonedas por parte del presidente, mientras que el oficialismo se enfocó en defender su agenda de reformas y austeridad fiscal.