El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, lideró un emotivo acto en la quinta de San Vicente con motivo del quincuagésimo aniversario del fallecimiento de Juan Domingo Perón, ocurrido el 1 de julio de 1974. Desde este histórico sitio, donde residió el tres veces presidente argentino, Kicillof inauguró las refacciones realizadas y reafirmó el compromiso con los ideales peronistas.
En un discurso cargado de críticas al actual contexto político y económico, Kicillof destacó que “nuestro único pacto es con el pueblo, con la Patria, y no lo vamos a traicionar por una foto”, en clara referencia al Pacto de Mayo propuesto por otros sectores. Afirmó que la reunión no es un verdadero pacto ya que carece de consenso genuino entre las partes involucradas y tampoco coincide temporalmente con el mes de mayo.
En su intervención, el gobernador enfatizó la importancia de mantener vivo el legado de Perón frente a lo que denominó como un “experimento anarco capitalista liberal libertario” que, según él, perjudica profundamente al pueblo argentino. Criticó duramente las políticas de un modelo que, a su entender, busca primarizar la economía, explotar recursos de manera precarizada y crear una sociedad dual con desigualdades extremas.
Además, Kicillof no ahorró críticas al actual presidente y sus políticas, asegurando que están llevando adelante un plan que desprecia los ideales de justicia social que históricamente han caracterizado al peronismo.
El acto contó con la presencia de destacadas figuras políticas como la vicegobernadora Verónica Magario, el gobernador de La Rioja Ricardo Quintela, la senadora Lucía Corpacci, el presidente del PJ bonaerense Máximo Kirchner, así como gremialistas, intendentes y funcionarios provinciales.
Kicillof reafirmó desde la quinta de San Vicente la vigencia del peronismo como alternativa frente a los desafíos actuales, subrayando que su compromiso es construir un futuro basado en los valores y principios que Juan Domingo Perón legó al pueblo argentino.
