Este sábado 2 de agosto, la comunidad de Llavallol será testigo de una ceremonia única e irrepetible en la Parroquia San Francisco de Asís: la dedicación del templo y la consagración de su altar. El rito, considerado uno de los más significativos de la liturgia católica, transformará el altar en un espacio sagrado de encuentro entre Dios y su pueblo.
La celebración comenzará a las 18 horas en el templo ubicado en la intersección de Moldes y Luzuriaga. Estará presidida por el obispo de Lomas de Zamora, monseñor Jorge Lugones, y contará con la participación del párroco, sacerdotes, diáconos, autoridades locales y numerosos fieles.
Durante el rito, se llevarán a cabo diversos gestos simbólicos, entre ellos la incensación del altar, que representa la purificación y santificación del espacio, y simboliza también la oración del pueblo elevándose hacia el cielo. La ceremonia, cargada de solemnidad y sentido espiritual, marca un antes y un después en la vida de la parroquia.
Con una historia que comenzó en 1942, la Parroquia San Francisco de Asís fue originalmente una capilla perteneciente al convento de los frailes capuchinos. De estilo neogótico, el templo fue inaugurado el 8 de diciembre de 1944. En 1988, la orden capuchina cedió la parroquia a la Diócesis de Lomas de Zamora, que continuó su misión pastoral hasta la actualidad.